caminar por el desierto,
en la arena caliente,
enterrando los pies en la suavidad,
la gracia de entregarse a lo desconocido...
tu estas en el centro,
eres el templo de mi peregrinación,
en ambos lados del mundo estas,
como un angel con las alas extendidas...
en tu nombre crecen frutos,
en tu nombre nacen latidos,
en tus sueños rien los niños,
realmente se vive en tu nombre...
necesitamos regresar el tiempo,
saber que la arena fue una roca,
conocer el tiempo y sus secretos,
reconcocer nuestros ojos en la distancia...
todos los dias,
un poco mas cada dia,
dime que me quieres, murmuralo,
llevame en la caricia de tu mano
cuando tocas tu piel...
y si te quedas un momento mas,
seremos las unicas personas en la arena,
quedate junt a mi,
y hagamos de este ultimo momento
eterno uniendo nuestros labios...
toma mis labios,
como si quisieras besar el fruto prohibido mil veces,
no nos preocupemos si el amanecer nos sorprende piel a piel,
cuando sabemos que podriamos morir abrazados...
el sol nos cego,
tratamos de caminar en la arena,
tomados de la mano,
decimos palabras que se evaporan en el calor...
caemos,
con las palabras,
caemos,
con las lagrimas,
caemos,
con la mirada,
caemos,
uno sobre el otro,
caemos,
y el sudor nos une,
caemos,
y no tenemos miedo...
pienso en ti y se evapora el pensamiento,
forma una pequeña nube, pequeña como tú,
me guia y da sombra,
me alimenta con su agua, me deja vivir...
me dejas?
dejame sentir una vez mas tus lunares,
una vez mas en luna llena,
dejame contarlos a la luz de la luna,
brillan mas en tu piel suave...
librame de sentir tu tentación...
c. althieri
